Google Books gana la última batalla en EEUU

El 18 de abril de 2016 la Corte Suprema de Estados Unidos dejó firme un fallo que había declarado que el proyecto “Google Books” era legal.  Esto pone fin a una batalla legal que lleva ya 11 años y que analizaré a continuación

¿Qué es Google Books?

Google Books nace de una serie de acuerdos entre Google y una serie de grandes bibliotecas públicas a partir del año 2004. El acuerdo consistía en que las bibliotecas dejarían scannear a Google todo el material disponible y Google les entregaría una copia digital del material. Desde entonces, Google ha escaneado unos 20 millones de libros.

Google Books funciona como un motor de búsqueda donde los usuarios pueden buscar cualquier tipo de información. El resultado de esa búsqueda son los libros donde esas palabras aparecen. Luego el usuario puede acceder al libro y ver su información básica (tapa, título, autor, año de publicación, etc). El usuario también puede acceder a más información sobre el libro, incluyendo, todo o parte del material. Google mismo explica cuales son estas opciones:  

  • Full view (vista completa): Es posible acceder a todo el material sí el libro está en el dominio público o Google ha obtenido la autorización del titular. 
  • Limited preview (vista parcial):  Es posible acceder a un par de páginas del libro (generalmente prólogo y primer capítulo). Según Google solo es posible acceder a una limited preview si el autor o la editorial lo han autorizado. 

  • Snippet View (vista de fragmentos): Solo es posible acceder a un fragmento pequeño del material donde figura la solo la frase buscada y algunas palabras más. 

  • No preview (sin vista): Solo es posible acceder a los datos básicos del libro y nada más. 

Google no recibe ingresos de publicidad por Google Books, a diferencia de lo que sí sucede en el motor de búsqueda común. También hay que destacar que Google pone a disposición una herramienta para que los titulares eliminen cualquier libro de esta base de datos.

El caso judicial

En el año 2005 un grupo de autores y la “Author’s Guild” (una cámara americana que representa autores) iniciaron una demanda contra Google alegando que el proyecto Google Books violaba las leyes de propiedad intelectual de Estados Unidos. En 2011 Google y los demandantes llegaron a un acuerdo que hubiera permitido que Google pudiera explotar aún más esta base de datos a cambio del pago de una licencia, pero la justicia rechazó el acuerdo. La demanda siguió su curso; en 2013 el juez a cargo del caso falló a favor de Google; en 2014 la sentencia fue confirmada; los demandantes apelaron a la Corte y Google contestó el recurso;, finalmente, el 18 de abril de 2016, la Corte Suprema de Estados Unidos se negó a tomar el caso, por lo que la sentencia quedó firme.

La justicia americana falló a favor de Google porque entendió que el proyecto Google Books era  uso légitimo (fair use) y por tanto estaba amparado por la ley de Copyiright. Rápidamente, el “fair use”  es una regla de cuatro pasos que los jueces americanos deben utilizar para evaluar cualquier caso de utilización de una obra ajena sin permiso. Estos pasos son: 1) el propósito y el carácter del uso en disputa; 2) la naturaleza de la obra protegida con derechos de autor; 3) la importancia de la parte utilizada en relación con la obra en total, y 4) el efecto de dicho uso en el mercado sobre el valor de la obra protegida con derechos de autor. Hay que destacar que el “fair use” es un instituto de la ley americana que no aparece en las leyes de derecho de autor de Argentina y, en general, de América Latina y Europa. En Argentina, para el caso, existe el derecho a cita del artículo 10 de la Ley de Propiedad Intelectual, que autoriza la reproducción de hasta 1000 palabras de una obra para fines no comerciales.

Bajo el manto del “Fair use” la justicia americana determinó:

  • Que el motor de búsqueda de Google Books, que permite que se busque libros a través de palabras clave no infringe la ley. Y como este motor solo funciona si se escanean los libros, tampoco infringe la ley el escaneo y resguardo de la copia digital.
  • Que la vista de fragmentos (snippet view) tampoco infringe la ley porque solo permite a quien busca ver el contexto en donde aparece la frase buscada.
  • Que, en general, Google Books no tiene efecto en el mercado protegido (cuarto factor del “Fair Use”).
  • Que la copia digital que Google Books entrega a cada biblioteca tampoco infringe la ley y que si una biblioteca, por ejemplo, utilizara la copia digital para fines contrarios a ley entonces ella -y no Google Books -, sería responsable de infringir la ley.

El fallo, claro, es una sentencia de la Corte Americana y sus efectos solo se extenderán a ese país. Pero es claro que, por lo menos en los Esados Unidos, la batalla de «Google Books» ha terminado

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